Tantas cosas suceden en el mundo interior del hombre; un universo acaso más grande que el de afuera, pero desconectado de nuestro día a día. Tan imposibilitado de enriquecernos porque no sabemos como oír su voz. Abramos pues, nuestros oídos, a ese aparente silencio interior que algo nos dirá en el idioma del alma.
Que ese mundo interior se haga pensamiento para ustedes.
Ha de llegar...
La paz ha de llegar, iluminará nuestras vidas;
ésto será en la renovación de los corazones.